12 - Blooming (0) vs Bolivar (1)

“Váyanse todos...” retumbó en el Tahuichi. La situación de Blooming fue y sigue siendo delicada en este Clausura. Desesperado, parado casi al borde de la cancha, el técnico Gustavo Díaz impartía las últimas instrucciones poco antes de que el juez central decretara el pitazo final. Cuando lo hizo, Blooming entero se derrumbó, la bronca de los hinchas salió a relucir. Bolívar vino y le ganó merecidamente más allá de que el resultado (1-0) no lo diga.

Es cierto, tuvo el local chances de empatar, pero también lo es que Bolívar pudo golear de no ser por la falta de efectividad y porque, además, dio la impresión de que por momentos ‘sobró’ a un rival que lució flaco. Blooming no jugó bien y está claro que Díaz no logra darle la vuelta. Gabriel Valverde comenzó jugando como lateral izquierdo (Callejón hizo fiesta por ahí) y sorprendió la salida en el complemento de Alejandro Gómez en un momento en que el equipo necesitaba vena, ímpetu y garra.

Blooming recibió un baile en la primera etapa y pudo ser goleado en el complemento. En el inicio Bolívar fue un aluvión, pasó por encima a un rival confundido, nervioso, con desconfianza casi plena que sacó de sus casillas a sus hinchas. La visita lo desbordó cuantas veces quiso por derecha con Yecerotte y Callejón, y por izquierda con Sánchez Capdevilla más prendido que nunca. El local en cambio penó demasiado, ‘Micky’ Loayza entregó como cinco pelotas mal provocando la bronca en la tribuna y en sus propios compañeros que le reclamaban. La situación era difícil.

Ante ese panorama, Bolívar sacó provecho. Callejón (6’), Luis Gutiérrez (9’) y Ricardo Pedriel (14’) estuvieron a tiro de marcar. Las manos de Marco Vaca y la falta de precisión impedía la apertura; sin embargo, a los 19’ los paceños tuvieron su premio. Perdió la pelota Loaiza, centró Callejón, Pedriel se la bajó con la cabeza a Ferreira y el uruguayo liquidó cruzado (1-0). Merecida ventaja para un equipo que pudo aumentar luego con Pedriel y con el mismo Ferreira; a Blooming lo pasaban por encima.

Es que en la academia no había conexión, no había un líder futbolístico porque Loaiza regaló balones fáciles y Contreras terminó derribado cada vez que intentó encarar. El claro reflejo de la desconfianza del equipo fue cuando el propio Koke, antes del gol de Ferreira, se sacó de encima a dos zagueros y en vez de definir él estando solo ante Quiñónez, decidió darle el pase a Sergio Almirón, que estaba en posición ilícita. Blooming pagaba caro esa falta de confianza.



Se mejoró pero no bastó

Díaz decidió ratificar el mismo onceno para el complemento y las dos claras opciones de Almirón (49’ y 52’) hacían presumir un cambio de actitud, pero no fue así, porque Pedriel, Ferreira y Lizio, que ingresó después, tuvieron chance de liquidar el pleito.

Lo mejor de la academia fue el tiro libre al palo que estrelló Almirón (78’) en medio de un lamento generalizado. De las variantes del DT celeste (Maldonado, Sandóval y Ayala) solo el primero respondió, pero no bastó porque Bolívar lo pudo apabullar y no mereció acabar con la presión de su rival. Al final Blooming volvió a caer en el Tahuichi, pero lo más lamentable es que no le encuentra la vuelta. Ayer la Policía tuvo que intervenir ante el pedido de que “se vayan todos”. 
En caliente 

“Si alguien cree que con mi salida se soluciona todo, me voy sin problemas”
Gustavo Díaz - DT de Blooming

“Tuvimos varias chances para liquidarlos, pero los perdonamos”
Nelson Cabrera - Defensor de Bolívar